QUÉ HACEMOS
TERAPIAS PSICOLÓGICAS
En Apunt psicòlegs trabajamos a nivel terapéutico con personas que necesitan apoyo psicológico por diferentes motivos en algún momento de su vida. Así mismo, también realizamos evaluaciones psicológicas a quienes lo necesitan y ofrecemos tratamiento psicológico tanto a niños como a adolescentes y adultos.
Terapia individual
Es un encuentro entre terapeuta y cliente donde se establece un vínculo terapéutico basado en la aceptación incondicional, la empatía centrada en la persona y la autenticidad del terapeuta.
En cada sesión, el terapeuta se adapta a las necesidades particulares del cliente, con el objetivo de proporcionarle el apoyo y herramientas necesarias para que éste promueva los cambios oportunos que le lleven a una mejora de su calidad de vida.
Gracias a que nuestro equipo cuenta con profesionales de diferentes corrientes dentro de la psicología (Terapia cognitivo-conductual, Terapia Gestalt, Terapia Sistémica), podemos ofrecer el tipo de intervención que mejor se adecúe a las características de cada persona.
Terapia de pareja
Está dirigida a ayudar a parejas que están pasando por un momento difícil en su relación sentimental.
El objetivo es acompañar a la pareja en la resolución de sus conflictos
Terapia familiar
Es un espacio en el que se trabaja con la totalidad del sistema familiar o con parte de él, puede ser de forma presencial o no, pero siempre teniéndolos presentes. Se centra en las relaciones y en la comunicación con los entornos más cercanos de la persona.
Terapia en grupo
El trabajo en grupo, dirigido por un profesional, permite compartir experiencias y dificultades con otras personas , así como el aprendizaje individual empatizando con las vivencias de otros, cosa que enriquece a cada uno de los miembros del grupo y al propósito de la terapia.
Los objetivos, al igual que en la terapia individual, van dirigidos a proporcionar apoyo y herramientas necesarias para que las personas promuevan los cambios oportunos que le lleven a una mejora de su calidad de vida.
Estas terapias pueden ir dirigidas tanto a personas que presentan dificultades similares como a otras que busquen crecimiento personal o conocerse más a sí mismos.
Terapia Gestalt
La terapia gestalt es un método de exploración de la experiencia presente en la situación de encuentro entre cliente y terapeuta. Su objetivo es reestablecer en la persona la capacidad de crear, elegir y ampliar las posibilidades y modos de estar en el mundo con los otros mediante la focalización en el darse cuenta y con el aumento del darse cuenta.
Terapia sistémica
Es el modelo psicoterapéutico que trabaja con el grupo familiar, la pareja o con los sistemas a los que la persona pertenece o se relaciona, y que entiende que lo ocurre en su seno tienen que ver con la participación de todos sus miembros.
Centra su atención y objeto de intervención sobre el sistema, en su totalidad o en parte de él, movilizando sus propios recursos para actuar y transformar las relaciones y la situación en que se encuentran. Aborda los problemas que la gente presenta en el contexto de sus relaciones con personas significativas en sus vidas y en sus redes sociales.
Está basada en la teoría general de sistemas, la teoría de la comunicación y la cibernética.
Talleres para niños y adolescentes
Realizamos talleres con el propósito de dotarles de herramientas que puedan poner en práctica en su día a día, y así mejorar la relación con sus compañeros, profesores y familiares, su comportamiento y especialmente su autoestima y bienestar emocional.
Los contenidos de las sesiones se adaptarán a las peculiaridades del grupo, intentando abordar aquellas dificultades específicas que presentan en su día a día, así como aquellas que puedan surgir durante el desarrollo del taller.
Los objetivos a trabajar, entre otros, son:
- Mejorar la autoestima (bienestar emocional).
- Desarrollar estrategias para relacionarse mejor (habilidades sociales).
- Controlar la impulsividad (técnicas de autocontrol).
- Aprender a identificar y expresar sus sentimientos.
- Fomentar la comunicación no violenta y respetuosa.
- Solucionar conflictos (compañeros, familia, profesores…).
Evaluación psicológica
Consiste en la recogida de información mediante una entrevista clínica realizada a las personas más cercanas y al propio cliente para recabar la máxima información sobre su historia de vida y su situación actual.
Esta información se complementa junto a la administración de otros instrumentos psicológicos (test, cuestionarios) que proporciona un perfil individualizado y en algunos casos un diagnóstico, el cual nos permite entender mejor la situación del cliente y proponer una intervención acorde a sus necesidades.
Terapia cognitivo-conductual
Es una de las escuelas de psicoterapia más antiguas y se caracteriza por su forma de entender la naturaleza humana, y por su metodología. Entiende que de forma rápida y concreta, o progresivamente a lo largo de los años, nuestros problemas emocionales son fruto del aprendizaje. La tarea del psicólogo cognitivo-conductual, por lo tanto, es la de enseñar una serie de estrategias psicológicas probadas científicamente para que la propia persona pueda manejar su problema emocional o conductual, y en muchos casos eliminarlo. En cuanto a la metodología, la terapia cognitivo-conductual es una disciplina científica, y por lo tanto ofrece tratamientos que han demostrado ser eficaces a nivel experimental, en estudios controlados y rigurosos a nivel científico.
El tratamiento contará de 4 fases: la de evaluación, en la que el psicólogo recogerá toda la información necesaria para entender el mantenimiento y el origen del problema (suele durar dos o tres sesiones); la de explicación de la hipótesis, que suele durar una sesión, y en la que se explicará al cliente los mecanismos psicológicos que actúan como mantenedores del problema en términos comprensibles, y se plantearán unos objetivos de tratamiento; la de la terapia, en la que se enseñarán una serie de estrategias nuevas para poder afrontar mejor su problema, y en muchos casos solucionarlo, las cuales practicará en casa mediante unas tareas concretas, con la supervisión del psicólogo (esta fase es la más larga, y suele durar entre 12 y 15 sesiones); y, por último, la fase de seguimiento, que suele constar de unas 2 a 5 sesiones, cada vez más espaciadas en el tiempo.